Hoy venía caminando por el centro y vi a un señor, indigente, que llevaba a dos nenitos de no mas de 5 años en un carro como el de los cartoneros, pero mas chico. Mientras caminaba empujando el carro pedía monedas.
Lo primero que sentí fueron ganas de preguntarle porque tenía ahí a los nenes, así, en esa situación, con este calor, porqué no buscaba ayuda, como había llegado a estar así, etc. etc. etc. Todo con la mejor intención de ayudarlo. Pero después pensé que seguramente si empezaba a preguntarle ese tipo de cosas al Sr. quizás podían ponerlo incomodo, o hasta quizás violento, de toda la gente que había a mi alrededor... quién hubiera saltado a defenderme?? No digo que sí o sí fuese a pasar algo, pero nunca se sabe... Supuse que todos los que caminaban en ese momento por Av. Cordoba iban seguir de largo si la cosa se ponía fea, o a callarme, o a decirme para qué me meto, y demas. Y ya. Me callé. No dije nada. Y esos nenes...
3 comentarios:
Porque turra? Yo pienso lo mismo aunque tampoco lo digo.
Convengamos que turra no, pero no propones un analisis muy profundo de la realidad...
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